miércoles, 8 de agosto de 2012

Talavera (talaverdad)

Desde que lo escuche por primera vez me gusto el chiste de "hay una casa verde en una calle verde con una vereda verde donde camina un chico verde que tiene una mochila verde y una gorra verde que se frena en la esquina verde porque el semáforo esta en rojo y me cago el chiste" Lo mio es mas o menos así, tengo una camisa violeta, camino por la calle violeta con vidrieras violetas canto en violeta mis lagrimas son violetas me tomo el ascensor violeta con mi vecino violeta con su perra violeta y me mira las lagrimas violetas y yo le devuelvo la mirada y ni siquiera puedo decirle "Me pelie con mi novio", no porque no tengo y no me gusta mentir, porque mis verdades son violetas y mis mentiras amarillas y se complementan, porque mis mentiras nacen de la verdad, todo termina ahí y empieza ahí: si, en mi verdad, y si, es lo que explorobuscoencuentroypierdoybuscoexploroencuentroyasi y si así, y si mi llanto es violeta, mi verdad violeta, mi mentira amarilla y mi risa naranja. Risa para hacer jugo tengo, agradezco que lo de exprimir me vino incorporado y no busco la otra mitad, yo creo que mi cómplice es un limón o un pomelo, para naranjas ya estoy yo y a mi me gusta ser protagonista y no lo digo, directamente lo hago: Entonces había una vez un día en donde se enamora y deja la casa y se va a morar a otra morada con otro moro(cho) o castaño o sin pelo, sin pelos en la lengua y se deja morar enamorada, moras comiendo, morados los cachetes, morado el corazón,  morado el pelo y la piel y el morado no es como el colorado con el que pintaba los corazones a los ocho, el morado es como el violeta. Y mi corazón cambia de color y de forma pero ahora lo acepto así, y si violeta.

j.

2 comentarios:

  1. me da felicidad que seamos amigas. ¡andemos en patines, riamos, charlemos y (nos) leamos juntas hasta no cansarnos nunca!

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